viernes, 17 de junio de 2011

La Conquista Del Peruano Por Sí Mismo


Por: (*) Mesias Guevara Amasifuen

El hombre permanentemente ha estado empeñado en conquistar el espacio, tierras lejanas, civilizaciones de otros continentes, estos hechos los podemos verificar en la historia universal, donde se da cuenta de las cruentas batallas. Muchas veces orientadas por el dominio territorial, por el control del mar o de las riquezas naturales.
En nuestra historia con la venida de los españoles, con la presencia de los incas que consolidaron el Tahuantinsuyo, también podemos verificar hechos en la que se nota el espíritu conquistador. Al hablar de conquistas muchas veces nos imaginamos haciendo uso de la fuerza.
Hay otras conquistas de las que muy poco se habla y que es necesario referirnos a ella, me refiero a “La conquista del peruano por si mismo”. Dentro del proceso de construir el Perú como una gran nación, encontramos al peruano como el gran protagonista, de allí la necesidad de plantear la Tesis que los peruanos, debemos conquistarnos así mismos. Es importante redescubrirnos, desarrollar nuestra creatividad y despertar a nuestro yo interior para que de ella fluya la luz que nos guie por el camino.
Los peruanos tenemos diferentes roles que nos llevan a participar en diversas actividades profesionales, empresariales, conyugales, como ciudadanos, etc.
El paradigma que debe orientar nuestras vidas es el pensamiento que viene de adentro hacia afuera, dentro de nosotros esta la fortaleza y el vigor que nos impulsa a seguir adelante. El vigor y la fortaleza lo vamos a encontrar en la ética del carácter que se sustenta en los principios y valores como la integridad, honestidad, equidad, solidaridad y el sentido de justicia.
Uno de los ejes centrales que los peruanos tenemos que consolidar es el tener la capacidad de trabajar en equipo, tal como lo hacían los antiguos peruanos a través del ayni y la minka, gracias a los cuales solucionaron los grandes desafíos que en su momento se les presentó. El sentido competitivo a hecho que los peruanos nos enfrasquemos en competencias fratricidas tanto en el plano empresarial como el político, falta de compromiso con las tareas emprendidas.
Todos conocemos el deporte regatas, gana el que mejor distribuye a su equipo dentro de la nave, al mas pequeño lo ponen al frente para que con la bocina grite “rema, rema”, al ritmo del cual se mueven los remos, los equipos japoneses ganan muchas de estas competencias porque están bien distribuidos. Haciendo una extensión de las regatas a las empresas de nuestro país, podemos notar que al mas pequeño lo ponen para que reme y los demás se ponen a gritar “rema, rema”, al final la nave no se mueve.
Muchos peruanos solo han desarrollado el pensamiento y la palabra, es decir con inteligencia desarrollan grandes ideas y hablan elocuentemente pero son renuentes a la acción por lo que muchas se quedan en la inacción, conformismo, egoísmo, impotencia y frustración. De allí que es necesario que tengamos en cuenta la triada pensamiento- Palabra- Acción. Tomas Alva Edinson decía 99% de transpiración y 1% de inspiración.
Dentro de las actividades que se poner delicada concentración es en la política, muy pocos mostramos interés por ella. Esta debe desarrollarse sobre la base de los nobles ideales de hacer patria, sobre ellos debemos establecer la gran coalición que nos permita enfrentar a los grupos de poder que están dirigidos por apetitos subalternos, bajo la consigna del poder por el poder.
Los peruanos deben sentirse parte de la nación para lo cual es importante que nos desarrollemos teniendo en cuenta la inteligencia espiritual.
Urge elevar el autoestima de los peruanos, es necesario que el peruano tenga confianza en si mismo, para que pueda enfrentar con éxito los desafíos y a la vez pueda liderar proyectos de desarrollo, los mismos que tendrán un impacto en el Perú.
Para elevar el autoestima es necesario leer la historia del Perú y ver los grandes aportes que el Perú le ha dado al mundo, parecemos mendigos sentados en un cofre lleno de tesoros. Los tesoros están en el gran patrimonio histórico-cultural que nos han legado los antiguos peruanos, grandes recursos naturales expresados en la biodiversidad, en los hermosos y profundos valles, en la inmensidad de las especies de la flora y la fauna. Definitivamente somos mendigos que esperan alcanzar el gran despertar de su conciencia de su convicción y de su fe en la capacidad de alcanzar la gran victoria, que nos permita caminar con la frente en alto. La luz de ese gran despertar lo constituye la consolidación de la Identidad Nacional la misma que debe servirnos para reconocernos así mismos, así como redescubrir y revalorar nuestra patria
Definitivamente la victoria se expresará cuando derrotado el hambre, la pobreza, la mortalidad, el analfabetismo, la ignorancia y la desintegración de nuestro país. La victoria la habremos alcanzado cuando hayamos establecido una sociedad justa.
Para alcanzar ese noble ideal es imperativo que actuemos guiados por los principios los mismos que constituyen nuestras maestras, que nos den la capacidad de modelar el futuro. También es necesario que tengamos la capacidad de romper ciertos paradigmas que nos atan al sub desarrollo como la impuntualidad, decir que el peruano es ocioso, el desorden, manifestar sabemos que roba pero hace obra, entre otros.
En el andar debemos encontrar el complemento de los opuestos, una expresión clara de esto es lo que debe existir entre el hombre y la mujer. El viejo dicho “detrás de un gran hombre hay una gran mujer”, debe ser cambiado por “al lado de gran hombre hay una gran mujer, y al lado de una gran mujer hay un gran hombre”.
Definitivamente una las grandes tareas que existe en nuestro país es lograr que el peruano en general sea el protagonista del cambio, sin temores, sin rencores y sin complejos. Como los sabios que hacen posible brillar la luz en la oscuridad hija de la ignorancia, tenemos el desafío de iluminar nuestra conciencia para hacer posible que fluya de nosotros la luz que ocasione el gran despertar, para consolidar la conquista del peruano por si mismo.

(*) Ing.MBA.DBA(c)

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