domingo, 23 de diciembre de 2012

Salarios públicos bajo la lupa


Por: Mesias Guevara Amasifuen

Cuando postulé al Congreso de la República, realicé una campaña austera, fue hecha con poca inversión que fundamentalmente provino del aporte que hicieron familiares, amigos y correligionarios, al final  el pueblo generosamente me dio su respaldo. Una de mis propuestas electorales que hice fue el de buscar y fomentar la transparencia en el manejo de los salarios en todos los estamentos del Estado.

En ese sentido presenté una moción de orden del día, en la que se invocaba al Presidente del Consejo de Ministros, para que publicara los sueldos y gastos de los funcionarios públicos.  Ha pasado cerca de un año y extrañamente no se ha dado cumplimiento a dicha moción, el mismo que fue aprobado por el Consejo Directivo del Congreso. He insistido en el Congreso y poca importancia se le ha dado al tema. Voy a seguir insistiendo.  

Por otro lado escaneé  mi boleta de pago y lo di a conocer por Internet. A mucho les pareció fuera de común lo que hice, incluso hubieron quienes me criticaron. Consideré que era necesario que el pueblo conociese mis ingresos.

En la Constitución del 79 por la cual juró el Presidente Ollanta Humala, precisaba que el sueldo máximo de la administración pública debería la del Presidente, luego los Congresistas,  de allí los Ministros y los funcionarios públicos, en ese orden.

En estos momentos se vienen dando serias críticas al reajuste aprobado al gasto de representación de los congresistas. Esta coyuntura nos da la gran oportunidad para poder revisar y publicar la escala salarial  de todos los estamentos del Estado. Es imperativo que el pueblo lo conozca. Según la información  obtenida de los portales de transparencia obtenemos la siguiente información: Concejo Nacional de la Magistratura S/40221, Contraloría S/33175, Banco Central de Reserva S/.33100, Superintendencia de Banca y Seguro S/.33100, PCM S/.30779, JNE S/.27117, Petroperu S/.24508, TC S/.23617, Poder Judicial S/.23217, Congreso del República S/23100, Defensoría S/21017.

Un Congresista recibe como sueldo neto S/.10200, más S/5000 neto por gasto de representación. Haciendo un total aproximado S/.15000, después de haber hecho el descuento de impuestos por Ley. No tiene chofer, y tampoco les asignan un auto como se comenta. De los S/15000, tiene que financiar sus gastos personales y los que tienen que ver con estadía y alimentación, cuando realiza sus viajes. En mi caso pago una oficina en Jaén y otra en Cajamarca que pago conjuntamente con mis correligionarios.

El reajuste neto al gasto de representación propuesto asciende a S/4500 aproximadamente. Creo que más importante que concretar dicho reajuste, es dar las facilidades a los Congresistas para que podamos movilizarnos y podamos reunirnos con los pobladores más lejanos  que solicitan nuestra presencia y participación. El Consejo Directivo debe revisar la aplicación de dicho reajuste.  

Es importante la actuación de la prensa acuciosa, para que ayude a transparentar los salarios y los gastos que tienen los funcionarios públicos del Estado. A mi modo de ver hay un desorden salarial en nuestro país. 

La transparencia debe primar,  es el momento de ordenar y hacer público los gastos de los funcionarios públicos. Incluso debe conocerse los gastos que incurre palacio de gobierno. El Presidente de la República Ollanta Humala, debería dar a conocer al pueblo peruano, cuánto gana, y en que gasta. Igual los Ministros y los funcionarios públicos. Los salarios públicos están bajo la lupa.

 

     

domingo, 25 de noviembre de 2012

Voto Preferencial: ¿ser o no ser?

 
Por: Mesias Guevara Amasifuen

El objetivo fundamental que debe tener el sistema nacional electoral, es permitir que los hombres y mujeres de bien, sin distingo de raza, de credo o condición social y económica participen activamente en Política. Y así mismo debe garantizar que los mejores ciudadanos a través de elecciones limpias y transparentes lleguen a los cargos públicos.

En la actualidad para llegar a ser Congresista de la República, se tiene que pasar por diferentes vallas. La primera es que el partido político por el cual se postula, debe pasar la valla electoral de 5% o alcanzar 6 congresistas a nivel nacional. La segunda es que en la Región donde estamos postulando, debemos alcanzar la cifra repartidora. La tercera que es mas interno a las organizaciones se refiere al voto preferencial, es decir ganará el que obtenga el mayor número de votos preferenciales.

La permanencia del voto preferencial se ha convertido en el centro del debate de la reforma electoral. La presión mediática por desaparecer este mecanismo se hace notar a través de diversos artículos de opinión y propuestas legislativas que se han presentado en el Congreso.

Entre los diversos argumentos que se han emitido en contra del voto preferencial encontramos los siguientes: - Al interior de las listas parlamentarias genera “luchas fratricidas”, -El Congresista electo se siente dueño del curul, entre otros.

Los que argumentan a favor del voto preferencial manifiestan que: - Es el único mecanismo electoral que permite elegir a nuestros congresistas de manera democrática.

Ambos argumentos deben llevarnos a tener una profunda reflexión al respecto. En lo personal considero que mientras no haya una garantía de un proceso electoral intra partidario transparente e imparcial, definitivamente el voto preferencial debe permanecer porque constituye un mecanismo democrático. En mi concepto a diferencia de los que proponen eliminarlo, considero que debemos corregirlo y mejorarlo. Otro aspecto importante a tener en cuenta es que ante una eventual alianza electoral, nos da la flexibilidad al momento de construir las listas parlamentarias.

El argumento que el Congresista electo a través del voto preferencial se siente dueño del curul y no el partido, no es tan cierto. Eventualmente eso ocurre en aquellos que no tienen militancia definida y activa, por lo tanto no responden a ninguna organización partidaria. Ocurriendo todo lo contrario en los que militan activamente en algún partido político, ellos coordinan estrechamente con su organización.

La eliminación del voto preferencial favorece a los partidos políticos que tienen candidatos presidenciales locomotoras, ya que ellos son los que logran hacer ingresar a los candidatos congresales bajo una estrategia de Pull. Mientras que los partidos políticos que no tienen candidatos presidenciales locomotoras, tienen que hacer una estrategia Push- pull, es decir que el trabajo proselitista tiene que hacerse de arriba hacia abajo y de abajo hacia arriba. El candidato presidencial tiene que apoyar a sus listas congresales y los candidatos al congreso tienen que presionar en su jurisdicción para que su candidato presidencial obtenga un buen resultado, el esfuerzo es compartido para alcanzar la valla electoral y por ende la cifra repartidora. Si se elimina el voto preferencial, solo trabajarán los que encabecen las listas parlamentarias, los demás se sentirán sin oportunidad y por lo tanto no trabajarán, pudiendo ocurrir que el candidato congresal obtenga una buena cantidad de votos pero que no alcance la cifra repartidora. Esto perjudica a la plancha presidencial y a la lista parlamentaria.

Sin embargo, no podemos negar que el mecanismo del voto preferencial debe ser mejorado y actualizado, al respecto propongo lo siguiente: - Que exista un control efectivo sobre el gasto de campaña, hay candidatos que abusan de la propaganda electoral, - La preferencia solo debe ser por uno y no por dos como es ahora, - Que presenten propuestas de trabajo y que luego las cumplan, - Consolidar el pacto ético electoral.

La consolidación de nuestra democracia y la participación plena de la ciudadanía en general es urgente, en especial de los jóvenes y de las mujeres.

domingo, 17 de junio de 2012

Perú, un hermoso y noble desafio


Por: (*) Mesias Guevara Amasifuen
Cierto sector del país, muestra con orgullo las cifras macroeconómicas que dan cuenta del crecimiento económico. La política económica se fundamenta en las políticas macroeconómicas, sectoriales y sociales. La estabilidad macroeconómica, junto a la institucionalidad y a la tecnología, sustentan la competitividad de un país.
Sin embargo, socialmente encontramos una situación sumamente difícil y agresiva, caracterizado fundamentalmente por la pobreza y la inequidad.
Ambos quiebran la paz y la armonía social, fomentan la exclusión social de millones de peruanos, quienes no están en capacidad de responder a las tendencias mundiales como la globalización y el paso hacia la sociedad del conocimiento. La distancia de las clases sociales se está incrementando, prueba de ello es que la brecha salarial se está acentuando. Hay millones de peruanos cuyo salario diario es menor o de dos dólares, y otros que ni si quiera llegan a un dólar. La discriminación social actual, nos enrostra una sociedad con rasgos coloniales.
Campea la corrupción. Trayendo como consecuencia que el gobierno este concesionando y repartiendo los recursos naturales sin respetar las reservas de los parques nacionales, patrimonio histórico cultural, sin tener en cuenta la opinión de la ciudadanía, en especial de los pueblos originarios. En muchas jurisdicciones la actividad minera y de hidrocarburos, no están respetando las normas del medio ambiente. Definitivamente se está gobernando de espaldas a la realidad, las provincias cada día están más empobrecidas, sus pobladores no tienen capacidad de compra. No cuentan con la infraestructura necesaria para poder emprender un camino de desarrollo y que sea sostenible.
Hay quienes tienen el concepto equivocado de desarrollo, consideran que el incremento de modernos centros comerciales, es sinónimo de modernidad. Cuando en realidad estos solo son intermediarios financieros, quienes además tienen plena libertad para cobrar la tasa de interés que más les plazca, bajo el pretexto que hay libertad de mercado.
Nuestra economía en realidad se sustenta en el precio internacional de nuestros minerales fundamentalmente oro, cobre y plata. Nos hemos reducido a ser simples fuentes de materias primas, y sin la mínima intención de darle un valor agregado, que nos permita desarrollar una industria y generar empleo.
Además de ello podemos afirmar que no tenemos una política que nos permita alcanzar la competitividad, entendida esta como el camino para alcanzar el desarrollo económico cuyo beneficio sea para todos los peruanos, no como ahora que solo alcanza a una minoría. El soporte tecnológico, también brilla por su ausencia, la balanza comercial de conocimiento es deficitario, nuestras importaciones de bienes de capital son muy superiores a nuestras exportaciones, trayendo consigo que subsidiemos la investigación y desarrollo de investigadores extranjeros, así como la consecuente fuga de divisas. Esta situación también desnuda nuestro pésimo sistema educativo a nivel básico y superior, que además de carecer de infraestructura no está articulado a un sistema productivo nacional. La política energética carece de una visión estratégica.
Definitivamente la escena contemporánea que nos toca vivir es incierta. Esta constituye un verdadero desafío, para nuestra inteligencia y para nuestro espíritu, que en definitiva tiene que ser voluntarista, que considere que nuestro destino no está determinado.
¿Qué camino seguir?
En primer lugar, tenemos sintonizar y comprender las grandes necesidades del pueblo y sobre ella realizar las diferentes propuestas que busquen elevar el nivel de vida de todos los peruanos. Tenemos que entender el contexto internacional, respetar el compromiso que hemos adquirido al firmar los objetivos del milenio para superar la inequidad y el subdesarrollo. Por otro lado están las políticas de Estado del Acuerdo Nacional. Es importante lograr la institucionalidad para afianzar la gobernabilidad,
respetando las normas con el objetivo de generar un clima de paz y seguridad. Tenemos que desarrollar la competitividad, buscando la transformación económica, modernizando y consolidando nuestro soporte tecnológico, que logre la transformación de nuestra industria. La ciencia y la tecnología debe consolidar la generación de conocimiento, no solo a nivel académico sino también productivo. A nuestras actividades económicas hay que darle valor añadido. El uso de la tecnología información y comunicación tiene que ser intensivo, para disminuir la brecha digital. En esto tiene mucho que ver la reforma del estado y la descentralización, aspectos fundamentales que tienen que ser abordados con seriedad y con visión de futuro, para ello hay que actuar como estadistas.
Las cadenas productivas deben orientarse de tal manera que sirva para consolidar a las pymes, para ello el Estado debe permitirles el acceso al crédito, a la tecnología, en la búsqueda de mercados y capacitación permanente.
Es necesario lograr la inclusión social de millones de peruanos que no tienen acceso a los servicios básicos como la salud, educación, saneamiento y vivienda. Es necesario lograr el mecanismo para generar empleo digno respetando el derecho de los trabajadores. Es urgente interesarnos y comprometernos con los intereses del pueblo, pero sin demagogia.
No olvidemos que nuestro territorio geográficamente esta preñado de dificultades, los antiguos peruanos nos enseñaron a dominarlo, para ello debemos restaurar la tradición vial, la tradición hidráulica, la tradición planificadora y la ayuda mutua. La ocupación territorial debe ser respetando el medio ambiente, afirmando un ordenamiento territorial. La conciencia geográfica tiene que ir acompañado de la conciencia ecológica. Es necesario que sigamos en el empeño de articular e integrar a los pueblos del Perú. Así como, en el aumento de la frontera agrícola, lamentablemente solo el 4.27% del territorio nacional están aptas para la agricultura, nuestro futuro es seguir siendo “constructores de tierras”.
Para consolidar nuestra sociedad y el capital social, tenemos que lograr la afirmación de la identidad nacional, que nos permita afrontar con éxito la globalización y la trans culturalización, que esta agresivamente nos impone.
Del Perú antiguo debemos revalorar la trilogía andina: Honestidad, veracidad y laboriosidad. La consolidación de la Identidad Nacional, debe ser soporte de nuestro autoestima.
Es muy cierto que el camino a seguir es duro, nos impone un hermoso y noble desafío, que es el construir una patria justa, libre y solidaria. Donde los peruanos podamos vivir en paz y en armonía.

viernes, 13 de abril de 2012

Conga: ¿Y los monumentos arqueológicos?




Por: Mesías Guevara Amasifuen

El Perú es uno de los países que acoge en su suelo una gran riqueza natural, una envidiable mega biodiversidad, así como los testimonios de un desarrollo histórico sin paralelo en los Andes Centrales. De un lado, destaca la belleza sin igual de sus ríos, montañas, lagunas y, alrededor de esta geografía, la acción creadora del hombre en comunión con la divina naturaleza. Esta ecología cultural, hace que nuestro acervo natural e histórico constituya la base de nuestra identidad nacional, del justificado orgullo y autoestima colectiva correspondientes.

Pero ¡he aquí la gran paradoja! Mientras el territorio guarda celosamente los dones de la naturaleza y la evidencia creadora de nuestros antepasados, en algunas regiones como Cajamarca se pretende perpetrar una horrenda acción de lesa natura y lesa cultura. Es bueno saber que el Proyecto Minas Conga pone en grave peligro el patrimonio de la nación. Como ya es de conocimiento público la explotación minera implica la desaparición de milenarias lagunas y acogedores humedales, sustituyéndolos por reservorios cuya vida útil es de apenas 50 años, por efecto de colmatación. A ello se agrega ahora el inminente riesgo de afectar restos arqueológicos prehispánicos que constituyen la expresión de una cultura en incesante búsqueda de armonizar la organización social y los retos del medio ambiente.

En respuesta a una de las preguntas, que en su momento hiciéramos al Ministerio de Cultura, acaba de llegarnos un informe con Oficio 237-2012-DGPC-VMPCIC/MC firmado por la Directora General y recibido por nosotros el 10.04.2012, en el que se manifiesta: “El Proyecto Arqueológico Minas Conga ha registrado un total de 68 monumentos arqueológicos, en el ámbito de los distritos de Huasmín y Sorochuco, provincia de Celendín y la Encañada en la provincia de Cajamarca”, de los cuales 55 sitios han sido delimitados. En la misma comunicación el Ministerio expresa que se recomienda: “(…) verificar el total de monumentos delimitados y con sus respectivos expedientes técnicos el estado actual en que se encuentran, las medidas de mitigación adoptadas para la protección de los mismos y de qué manera se podría incluir alguno de los sitios en proyectos de investigación con puesta en valor…..”.

La normatividad vigente, que incluye los Artículos 22° y 30º de la Ley General del Patrimonio Cultural de la Nación (Ley Nº 28296), así como el Texto Único de Procedimientos Administrativos: D. S. Nº 022-2002-ED (publicado en el Diario Oficial El Peruano el 26.08.2002) y el Reglamento de Investigaciones Arqueológicas: R.S.-004-2000-ED, regula la expedición de los CIRAs (Certificado de Inexistencia de Restos Arqueológicos). Estando al mandato de este marco jurídico, Minas Conga, por tratarse de un proyecto de inversión privada en un ámbito evidentemente extenso, debe contemplar un Plan de Mitigación y Protección de los Restos Arqueológicos, y no limitarse a realizar labores contempladas en un Plan de Monitoreo Arqueológico como erróneamente se consiente en la Resolución Viceministerial Nº 151-2011-VMPCIC-MC del 04.02.2011. Este es evidentemente un tema preocupante a ser investigado.

Es un hecho que los restos arqueológicos circunscritos en el proyecto Minas Conga son parte del patrimonio cultural de la nación, por lo que su intangibilidad debe ser respetada. No se puede violentar ni poner en riesgo su existencia, antes bien debemos seguir las recomendaciones del Ministerio de Cultura, en cuanto a ponerlos en valor.

En la comunicación del Ministerio de Cultura a que hacemos referencia, se menciona también la existencia de algunos otros CIRAs. Es necesario conocer la forma en que se realizaron y se aprobaron. Para despejar dudas, nada mejor que disponer la realización de una auditoría. Es muy poco o casi nada lo que hasta el momento se ha dicho al respecto, pero por encima de todo “Los peruanos debemos respetar nuestra historia, para consolidar nuestra Identidad Nacional”.

“El ayer habla al mañana”. La historia nos enseña, dice y repite, que alrededor de las lagunas hubo vida, hay vida y habrá vida, mientras permanezcan intactas. Los antiguos peruanos habitaron el territorio y en los espacios ocupados nos han dejado huellas valiosas de su existencia, las mismas que la codicia del oro y el espejismo del progreso, pretenden borrar. Este despropósito no debe pasar.
Conga: ¿Y los monumentos arqueológicos?

Por: Mesías Guevara Amasifuen

El Perú es uno de los países que acoge en su suelo una gran riqueza natural, una envidiable mega biodiversidad, así como los testimonios de un desarrollo histórico sin paralelo en los Andes Centrales. De un lado, destaca la belleza sin igual de sus ríos, montañas, lagunas y, alrededor de esta geografía, la acción creadora del hombre en comunión con la divina naturaleza. Esta ecología cultural, hace que nuestro acervo natural e histórico constituya la base de nuestra identidad nacional, del justificado orgullo y autoestima colectiva correspondientes.

Pero ¡he aquí la gran paradoja! Mientras el territorio guarda celosamente los dones de la naturaleza y la evidencia creadora de nuestros antepasados, en algunas regiones como Cajamarca se pretende perpetrar una horrenda acción de lesa natura y lesa cultura. Es bueno saber que el Proyecto Minas Conga pone en grave peligro el patrimonio de la nación. Como ya es de conocimiento público la explotación minera implica la desaparición de milenarias lagunas y acogedores humedales, sustituyéndolos por reservorios cuya vida útil es de apenas 50 años, por efecto de colmatación. A ello se agrega ahora el inminente riesgo de afectar restos arqueológicos prehispánicos que constituyen la expresión de una cultura en incesante búsqueda de armonizar la organización social y los retos del medio ambiente.

En respuesta a una de las preguntas, que en su momento hiciéramos al Ministerio de Cultura, acaba de llegarnos un informe con Oficio 237-2012-DGPC-VMPCIC/MC firmado por la Directora General y recibido por nosotros el 10.04.2012, en el que se manifiesta: “El Proyecto Arqueológico Minas Conga ha registrado un total de 68 monumentos arqueológicos, en el ámbito de los distritos de Huasmín y Sorochuco, provincia de Celendín y la Encañada en la provincia de Cajamarca”, de los cuales 55 sitios han sido delimitados. En la misma comunicación el Ministerio expresa que se recomienda: “(…) verificar el total de monumentos delimitados y con sus respectivos expedientes técnicos el estado actual en que se encuentran, las medidas de mitigación adoptadas para la protección de los mismos y de qué manera se podría incluir alguno de los sitios en proyectos de investigación con puesta en valor…..”.

La normatividad vigente, que incluye los Artículos 22° y 30º de la Ley General del Patrimonio Cultural de la Nación (Ley Nº 28296), así como el Texto Único de Procedimientos Administrativos: D. S. Nº 022-2002-ED (publicado en el Diario Oficial El Peruano el 26.08.2002) y el Reglamento de Investigaciones Arqueológicas: R.S.-004-2000-ED, regula la expedición de los CIRAs (Certificado de Inexistencia de Restos Arqueológicos). Estando al mandato de este marco jurídico, Minas Conga, por tratarse de un proyecto de inversión privada en un ámbito evidentemente extenso, debe contemplar un Plan de Mitigación y Protección de los Restos Arqueológicos, y no limitarse a realizar labores contempladas en un Plan de Monitoreo Arqueológico como erróneamente se consiente en la Resolución Viceministerial Nº 151-2011-VMPCIC-MC del 04.02.2011. Este es evidentemente un tema preocupante a ser investigado.

Es un hecho que los restos arqueológicos circunscritos en el proyecto Minas Conga son parte del patrimonio cultural de la nación, por lo que su intangibilidad debe ser respetada. No se puede violentar ni poner en riesgo su existencia, antes bien debemos seguir las recomendaciones del Ministerio de Cultura, en cuanto a ponerlos en valor.

En la comunicación del Ministerio de Cultura a que hacemos referencia, se menciona también la existencia de algunos otros CIRAs. Es necesario conocer la forma en que se realizaron y se aprobaron. Para despejar dudas, nada mejor que disponer la realización de una auditoría. Es muy poco o casi nada lo que hasta el momento se ha dicho al respecto, pero por encima de todo “Los peruanos debemos respetar nuestra historia, para consolidar nuestra Identidad Nacional”.

“El ayer habla al mañana”. La historia nos enseña, dice y repite, que alrededor de las lagunas hubo vida, hay vida y habrá vida, mientras permanezcan intactas. Los antiguos peruanos habitaron el territorio y en los espacios ocupados nos han dejado huellas valiosas de su existencia, las mismas que la codicia del oro y el espejismo del progreso, pretenden borrar. Este despropósito no debe pasar.

domingo, 1 de abril de 2012

La gran cruzada


Por: Mesias Guevara Amasifuen

La historia y la época actual nos indican, que el mejor recurso que tiene el Perú es el peruano. La gran mayoría de los peruanos trabaja pensando en la mejor manera de ganarse la vida y poder alimentar a su familia. ¿Cómo podemos creer que en el Perú no hay recursos humanos capaces, si somos un país milenario que ha enseñado al mundo y le ha dado tantas riquezas? ¿Cómo podemos olvidar que gracias a la papa domesticada por los peruanos se salvó a Europa de la hambruna? ¿Cómo podemos negar que en el suelo peruano, se han construido las obras hidráulicas más impresionantes que la humanidad haya podido ver?

¿Cómo podemos olvidar que en el Perú, antes de la llegada de los españoles, ya existían la hermandad y la trilogía andina, que caracterizan la buena conducta y las buenas costumbres de los antiguos peruanos? El peruano brilla en el Perú y en el mundo, cientos de científicos y profesionales triunfan en el extranjero. ¿Cómo podemos decir que el peruano es malo, si vemos como el humilde campesino recorre sus tierras esquilmadas con los bolsillos vacíos, haciéndolas producir pese a todo para sostener a su familia? ¿Qué decir del minero que soterrado en un socavón trabaja pensando en sacar adelante a los suyos? ¿No hacen lo propio, es decir, denodados esfuerzos, el ingeniero, el profesor, el médico, el policía y el obrero, que dan su vida por la Patria?

En el Perú, existe una gran reserva moral. No permitamos que algunos medios de comunicación, a través de sus agentes, nos estén machacando diariamente la cabeza con mensajes negativos, que lo único que consiguen es hacer que baje la autoestima del peruano. Tenemos que hacer reformas profundas, sobre todo orientadas a consolidar el sistema democrático, haciendo que sea cada vez más participativo y representativo. Tenemos que hacer surgir la esencia del peruano que fundamentalmente es creativo, innovador, trabajador, luchador y de espíritu noble. Desterremos de nuestras mentes el pensamiento de que el peruano es malo. Hay malos, pero los buenos somos muchos más.

Definitivamente, hay grupos interesado en hacernos creer que todos los peruanos somos débiles mentales, que somos ociosos, que somos ladrones, que somos incultos. Cuánto darían nuestros vecinos por tener nuestra historia, cuántos quisieran provenir de los Incas y no como muchos que provienen de los barcos.

Los males del Perú no están en los peruanos, los males están en el sistema corrupto instaurado y defendido por una minoría, interesada en hacernos creer que todos somos malos para luego poder justificarse diciendo “qué te quejas de mis malas artes si eres igual que yo”.

No olvidemos que lo mejor que tiene el Perú es su gente. La gran multitud espera que su clase dirigente, empresarial, intelectual, científica, universitaria y gobernante se ponga a la altura de las exigencias actuales, es decir, espera con esperanza ser liderados hacia un futuro donde las promesas sean una realidad.

El hecho que algunos integrantes de nuestra política sean parte de aquella “clase política torpe, oxidada y jodida”, no significa que los malos sean muchos más que los buenos. Lo que está sucediendo en nuestro país es que muchos peruanos de buena voluntad han dejado de participar en política, simplemente porque algunos dirigentes políticos de manera mal intencionada, se han encargado de ensuciarla. En estos momentos hay una costra que se opone al surgimiento de nuevos líderes, simplemente porque no responden a sus intereses subalternos. Cuanta más indiferencia haya hacia la política, menor será la participación de los buenos ciudadanos y eso no hay que permitirlo.

Los peruanos de buena voluntad, que son muchos más que los malos, se han visto obligados a retroceder y lastimosamente han dejado vía libre a los malos, que son pocos y que quieren aparentar que son muchos. Los malos han hecho una alianza malévola con algunos medios de comunicación y con ciertos grupos mercantilistas que se hacen llamar empresarios.

La tarea es de todos los peruanos, y en especial de la juventud honrada, honesta, trabajadora y preparada que es numerosa. Es importante que la juventud y los sectores postergados decidan participar en política. Debemos romper el paradigma que nos han impuesto, haciendo que la buena gente peruana decida participar en política. Hasta cierto punto el pueblo tiene sus razones para considerar que la política es estéril y gangsteril, incluso nos han hecho creer que para participar en política hay que tener malas costumbres. Muchos hacen una analogía Político=Ladrón. Tenemos que desterrar con probidad y con el ejemplo tales “primicias” que de manera sistemática se ha sembrado en la mente de los peruanos.

Seríamos necios, si pensáramos que todo es color de rosa. Decir que todo está bien, que todo está de maravillas, no corresponde ciertamente a los hechos, máxime cuando los indicadores sociales son penosos, los índices de pobreza y extrema pobreza son alarmantes, como que el 33.8% tiene problemas de salud mental. Son asimismo desalentadores los índices de analfabetismo, mortalidad infantil, debilidad educacional, escasez en el acceso a las condiciones mínimas de vida, toda esta realidad cruda ha sido propiciada, cuando no creada, por un sistema de gobierno débil y cada día más debilitado por su visión incongruente del país.

El gobierno se ha deslegitimado y está de espaldas a la realidad. Podemos ver dos caminos totalmente diferentes y están en paralelo: uno que sigue el gobierno y otro que sigue el peruano. Al peruano poco o nada le importa lo que pasa con el manejo de la cosa pública. Cual líneas paralelas, estos caminos no se cruzan sino en el infinito donde seguramente no existe ningún peruano.

El peruano es lo mejor que tiene el Perú, el peruano ha de ser la base de la recuperación moral del país. Muchos son los peruanos exitosos, muchos los que construyeron nuestra cultura milenaria, muchos los que levantaron la patria después de la infausta guerra con Chile. Solamente los peruanos habremos de erigir el Perú en una Patria Grande. Entre los peruanos están aquellos que tienen la capacidad de ver el éxito donde otros no lo ven, están también los que tienen la capacidad de predicar esperanza donde otros destilan odio, están los que tienen la capacidad de tener un espíritu más rebelde que inconforme, porque inconforme puede ser cualquier mortal, pero más serán los peruanos de corazón, aquellos que actúen convencidos que las posibilidades del Perú son mucho más grandes que sus problemas.

Ha llegado el tiempo para los que tienen capacidad de nadar contra la corriente. Es tiempo de los que no tienen temor de andar y sentirse solos, de aquellos que sin reticencia se entregan a la prédica de las buenas costumbres, con el ánimo de construir más que destruir, de aquellos que son capaces de admirar y soñar con un Perú renovado y formado para la posteridad, de aquellos que sufren y que pueden llorar pero que nunca se rinden por alcanzar la victoria, de aquellos que sueñan y comparten sus sueños de amor por el Perú y su gente, de aquellos que simbolizan la peruanidad, de aquellos que son conscientes que hoy más que nunca es importante fortalecer la identidad nacional.

La lucha a continuar es grande, frontal, sacrificada y riesgosa, pero seguirá siendo librada por peruanos anónimos de buena fe, cuyas armas están en sus mentes y en sus corazones. A esta lucha con justicia podemos llamarla “la gran cruzada de la reserva moral”.

domingo, 25 de marzo de 2012

La Inecuación del Sub Desarrollo


Por: Mesías Guevara Amasifuen

La política económica se fundamenta en las políticas macroeconómicas, sectoriales y
sociales. La estabilidad macroeconómica, junto a la institucionalidad y a la
tecnología sustentan la competitividad de un país.
Somos conscientes de la importancia que tiene la estabilidad macroeconómica, el reflejo de indicadores como inflación, tipo de cambio, riesgo país son elementos importantes de este factor. También debemos ser conscientes que al solamente preocuparnos por un término de la ecuación, haremos que se convierta en una inecuación.
En la actualidad encontramos que en nuestro país existe una inecuación, la misma que
provoca conflictos sociales, los que a su vez originan atrasos y nos encaminan hacia el sub desarrollo. Esta inecuación se acentúa porque no se está dando la importancia a las políticas sectoriales. Diversas actividades productivas como el minero, pesquero, agrario, agroindustrial y el turismo, carecen de políticas que los induzcan a darle valor agregado.
En esta inecuación, se refleja que el modelo establecido es un modelo primario - exportador y de servicios, que ha convertido a nuestro país en un gran exportador de materias primas, el cual no genera empleo, solo genera desigualdad.
Urge darle mayor importancia a las políticas sectoriales y para que estas se consoliden, es importante desarrollar el acceso al crédito, desarrollar una política de Ciencia y Tecnología, una política de capacitación con el objetivo de alcanzar la conversión laboral, modernizar la infraestructura y ayudar a buscar mercados a nivel regional, nacional e internacional.
En esa inecuación también debemos tener en cuenta la identidad nacional y debe
sustentarse en nuestra historia, en la geografía, en el peruano y en el mestizaje.
Es bueno precisar que para transitar de la inecuación hacia la ecuación, debemos pensar seguir por el camino que nos guíe hacia la producción y no por el de la distribución, es decir, los programas sociales deben darse de manera técnica y jamás deben politizarse. El peruano en general más que limosnas quiere un empleo digno que le permita ganarse el salario.
Lastimosamente la inecuación se está acentuando y eso lo podemos ver en los índices de pobreza y exclusión social, sobre todo en los pueblos donde están situados los grandes campamentos y emporios mineros. Hay ríos como el Mantaro que carecen de vida, sus aguas irresponsablemente han sido y siguen siendo contaminadas, hay nevados que están empezando a olvidar sus copos de nieve, bosques que están perdiendo la alegría de su inmensa espesura verde.
La inecuación lo podemos ver en los niveles salariales, en el poder adquisitivo, en el alza del costo de vida. En la desesperanza de las amas de casa, profesionales, y jóvenes que siguen pensando que el futuro promisorio está en el extranjero. La inecuación también está en el acceso a la salud, a la vivienda, a la educación y a la alimentación. También la encontramos en los regímenes laborales, todavía siguen vigentes los services, incluso a nivel del gobierno nacional.
Para transitar de la inecuación del subdesarrollo a la ecuación del desarrollo es
necesario establecer la justicia. Porque sin Justicia jamás habrá desarrollo

Sueños de niños e ideales de hombres


Por : Mesias Guevara Amasifuen

Conforme se acerca el 28 de Julio, crece en el corazón de los peruanos el sentimiento patriótico, en especial en el de los niños. Mi rutina diaria, como la de muchísimos peruanos, empieza muy temprano. Uno de mis primeros deberes es llevar a mis pequeñas hijas al colegio, una va a inicial (Silvana) y las otras dos (Brenda y Camila) a primaria. En el trayecto entablamos una conversación fraternal, ellas me refieren las actividades que concitan la atención escolar en esta época del año.

Con entusiasmo, me cuentan que están preparando banderas rojas y blancas para adornar sus aulas, que están practicando danzas peruanas, que con el objetivo de celebrar el día de la patria sus maestras les están enseñando el significado de sus símbolos. Mientras conduzco el auto entre la llovizna de invierno, que no solo moja el pavimento sino que también enfría los huesos hasta el tuétano, la más pequeña me dice en voz alta: –Mira papi, cuántas banderas en las casas, cuántas banderas rojas y blancas. Miro por la ventanilla y, efectivamente, veo cómo las banderas flamean con orgullo, desafiando al viento y a la lluvia, se erigen hacia el cielo azul elevando una plegaria de esperanza por nuestro país.

Cuánta inocencia y amor por la patria encarnan los niños. Evocando mis años idos, llego hasta mi niñez y mi recuerdo trae al presente la imagen del tiempo pasado, cuando al igual que mis pequeñas hijas celebraba el día de la patria, cuando me preparaba para desfilar aunque no con gallardía pero sí con la algarabía que desborda un corazón inocente.

Estoy seguro que al igual que yo, millones de peruanos han sentido la especial emoción de celebrar el día de la Patria, estoy seguro que ese sentimiento de niños también lo tuvieron los ministros, los jueces, los congresistas, el Presidente de la República, los alcaldes, los militares, los policías, los profesores, los periodistas, los médicos, los ingenieros, etc., todos sin excepción. La pregunta inquisidora y desafiante brota sin temor y agitada a los cuatro vientos ¿en qué momento se perdió el sentido patriótico, si en algún momento habitó en nuestros corazones regocijados y aún en nuestras mentes?

Con nostalgia miro a mis tres pequeñas niñas, pienso en el futuro que les depara, sobre todo en un mundo que cada día es más violento, y en un país como el nuestro, donde mucha gente no camina sino deambula buscando cómo sobrevivir. ¿Cómo puede ser posible que los niños de ayer, hoy jueces no se comporten altura de su alta investidura y responsabilidad, y que muchas veces pongan en peligro el principio elemental de la justicia plena? ¿Cómo puede ser posible qué los niños de ayer, hoy ministros, negocien nuestra patria con el sentido mezquino de sentir el poder en sus manos, olvidando que éste es pasajero? ¿Cómo puede ser posible qué los niños de ayer, hoy congresistas, cometan perjurio, juren ante el Dios de Abraham cumplir con la ley, trabajar por la Patria, y que al final terminen legislando a favor de ciertos grupos de poder, elaborando leyes que solo a ellos favorecen? ¿Cómo puede ser posible que el niño de ayer, hoy banquero, tenga hoy un espíritu usurero? ¿Cómo puede ser posible que los niños de ayer, hoy periodistas, se vean hipotecados a pequeños grupos con el único objetivo de parametrar la información? ¿Cómo puede ser posible que lo niños de ayer, hoy ciudadanos, hayamos perdido el sentido patriótico?

La anomia se ha institucionalizado en nuestro país, se ha perdido el respeto por la autoridad, las normas son violadas, las grandes empresas se empeñan en no cumplir y hacen caso omiso a la legislación nacional. Periodistas, agentes que propugnan la dictadura de la economía del mercado (reconozco el mercado pero no su dictadura) en nombre de la libre competencia, han avasallado y limitado la acción del Estado. Quieren imponernos recetas que han tenido éxito en Chicago o Manhattan, que han sido discutidas en Warton, Yale, y Harvard. Al hacerlo olvidan que la nuestra es otra realidad. En física existe la ley “a toda acción hay una reacción”, al final encuentran el equilibrio porque la suma de las fuerzas es cero. En nuestra economía la demanda no reacciona de manera similar a la presión de la oferta, simplemente porque no hay competencia, simplemente porque un gran porcentaje de nuestra población es pobre, muchos pertenecen a las zonas rurales y como tal obtienen ingresos económicos muy por debajo de la línea media aceptada.

No podemos pensar que en el Perú sólo deba existir un tipo de economía. Es urgente e importante que entendamos que nuestro país es pluricultural, es decir, que somos un país de países.

Muchos problemas nuestros, indudablemente radican en nuestra falta de identidad nacional, muchos no quieren aceptar que somos producto de diversas vertientes, no quieren entender que el Perú se ha formado “por vencedores y vencidos” pero que al final somos un crisol de pueblos y que por nuestras venas corren torrentes de gloria. El desencuentro y la dominación generaron el odio al español y el menosprecio al indio. Muchos han olvidado que provenimos de un país milenario, han perdido el orgullo Inca y pre-inca, han olvidado que somos un país rico en historia, quizá el más rico de Sudamérica. Han olvidado la histórica trilogía andina “no seas ocioso, no seas ladrón, no seas mentiroso” y se han empeñado en el institucionalizar la mentira, el odio. Han impuesto lo trivial a lo importante, lo necio a lo justo, la viveza a la sensatez.

Frente a esta situación los peruanos de buena voluntad, libres y de buenas costumbres ¿podemos quedarnos quietos y ver cómo saquean e incendian a nuestro país, la tierra en la que yacen nuestros antepasados, donde hemos nacido con nuestros sueños e ilusiones, donde queremos que nuestros hijos vivan en paz? ¿Podemos quedarnos cruzados de brazos y ver cómo los politiqueros se reparten los pocos recursos que cuenta nuestro país? ¿Podemos quedarnos quietos y ver cómo los jueces, ministros y congresistas se comportan de una manera desleal y mezquina con nuestra Patria? ¿Se justifica que sigamos dándoles cheques en blanco a esta gente, para que legislen el futuro de nuestros hijos? ¿Podemos seguir callando cuando vemos cómo los banqueros se enriquecen cobrando las tasas de interés más altas de la región?. ¡Claro que no!

Levantemos y caminemos juntos, por el camino de la libertad, de la justicia plena y de la ley de la hermandad para conquistar nuestro suelo patrio, construyamos nuestro propio destino, impulsemos una patria sólida, propugnando el espíritu emprendedor, fortaleciendo la pequeña y mediana empresa, estableciendo un estado apropiado ni grande ni pequeño sino adecuado, que regule, que proteja y promueva las inversiones.

Constituyamos una clase empresarial con profundo sentido patriótico, apoyemos al campesino dándole asistencia técnica, crédito financiero y apoyo para que comercialice sus productos, hagamos florecer la industria nacional, consolidemos nuestro sistema económico, seamos cautos en el manejo fiscal, establezcamos un liderazgo limpio y honesto.

Procuremos para nuestros niños y jóvenes una buena educación, alimentación y salud, garantizando a sus padres un justo salario a través del trabajo digno. Redistribuyamos riqueza generando trabajo sostenido a través de la industria y agroindustria, desarrollando productos para el mercado nacional e internacional. Consolidemos nuestro sistema democrático, dándole estabilidad política y jurídica, haciendo que el gobierno sea eficaz y eficiente. Fomentemos en nuestro suelo el imperio de la justicia, derrotando la impunidad.

Fortalezcamos la alianza Universidad-Gobierno-Empresa, triángulo del desarrollo. Desarrollemos tecnología y hagamos que ésta se convierta en nuestra ventaja competitiva, masifiquemos su desarrollo en los colegios, institutos y universidades. No olvidemos que el potencial del peruano está en su capacidad creadora e innovadora.

Levantemos nuestros corazones, que guiados por sentimientos puros nos orienten hacia la institucionalización de una sociedad justa, proclamada por nuestra historia, por nuestros héroes, por nuestros antepasados, por los millones de peruanos que esperan con razón ver a su clase dirigente, universitaria y profesional honesta, ponerse al frente de los problemas nacionales, desterrando a los impúdicos del manejo de la cosa pública en función de su exclusivo bienestar personal. El Perú nos demanda acción y entrega, combinemos nuestros sueños de niños con nuestros ideales de hombres, para forjar la patria gloriosa donde los peruanos vivamos con amor, fe, paz y esperanza. ¡¡Viva el Perú!!

domingo, 18 de marzo de 2012

CONVERSATORIO “MI PEQUEÑO GRAN NEGOCIO”



Lima.- Con el objetivo de buscar espacios para de implementar herramientas y mecanismos que fortalezcan la pequeña y mediana empresa, el próximo miércoles 28 de marzo, luego de las 7:00 p.m., en la Sala Raúl Porras Barrenechea, se desarrollará a partir de las 7:00 p.m. el Conversatorio “Mi Pequeño Gran Negocio”, organizado por el Despacho del Congresista Mesías Guevara.Al evento han sido invitados como expositores la Superintendente Nacional de la SUNAT, Tania Lourdes Quispe Mansilla, para exponer el tema "Tributación al Día", el Ministro de la Producción, José Urquizo Maggia para disertar del tema “Programas orientados a las MYPES”; Eco. Guido Sánchez Yabar, Director del Programa Radial “Ventana Económica” (RPP) para exponer el tema “El emprendimiento en el Perú”; Luis Terrones Morote, Gerente de Desarrollo de COFIDE, para tratar la "Plataforma de Apoyo a la competitividad de las empresas"; el Dr. Luis Barba, Director de ADRA Perú, quien expondrá "Experiencia en finanzas para las PYMES”; y el expositor Anner Roman Neira, quien expondrá las “Experiencias exitosas de CENFROCAFE” en su calidad de presidente de dicha organización.

Asimismo, figuran como panelistas el Mg. Edwin Octavio Cisneros Gonzales, Decano de la Facultad de Ciencias Empresariales – UPEU; Norma Muro Del Castillo, Sub Gerente de Turismo de la Municipalidad Provincial de Chiclayo; Eduardo Lastra D., Director Diario MUNDO MyPE; Manuel Basualdo Iqquia, Presidente de la Asociación de Pequeños Empresarios de Computación Electrónica y Telecomunicaciones Wilson Informatic y el Dr. Mario César Romero Valdivieso, Decano del Colegio de Notarios de Lima. Al término de las disertaciones comentará el Congresista Mesías Guevara Amasifuen.

El ingreso es libre, previa inscripción con su número de DNI al cel. 987961070, y/o al Télf. 3117777 - Anexo 3723, así como mediante el correo ahuaman39@gmail.com.

domingo, 11 de marzo de 2012

Los silencios sobre Minas Conga


Por: Mesías Guevara Amasifuen

Cuando se pretende imponer un proyecto a base de medias verdades, de preguntas que se deja de responder, cuando se exagera el uso de los recursos psicosociales a través de los medios de comunicación masiva, surgen la desconfianza y la incertidumbre. Esto ocurre en el caso del proyecto Minas Conga, el mismo que fuera formulado y planteado bajo la atenta mirada y aliento de un Ex-Presidente de la República, que hace poco salió a decir que solo paga $3500 dólares mensuales por el alquiler de una casa.

El bendito proyecto ha sido evaluado por funcionarios diligentes inclinados hacia un lado de la balanza. El tiempo para la evaluación del Estudio de Impacto Ambiental, que en la práctica internacional suele oscilar entre 35 a 40 meses, batió el récord de celeridad en este megaproyecto que alcanzó a ser evaluado en tan solo 8 meses. La Autoridad Nacional del Agua, administradora de una generosidad que presume intrínseca, concede de manera rápida la autorización para verter las aguas de las lagunas, olvidando que estos repositorios naturales de agua son bienes de dominio público y, por tanto, son inalienables e imprescriptibles, pudiendo concederse sólo su uso a particulares conforme a ley, pero jamás autorizarse su destrucción o desaparición. De conformidad con la Ley Nº 29338, Ley de Recursos Hídricos, el agua acumulada en forma natural constituye patrimonio de la nación y no es susceptible de propiedad privada, ni puede ser dispuesta de manera libre sin respetar el medio ambiente. Incluso el uso de los recursos hídricos debe observar el mantenimiento del régimen hidrológico en beneficio del ambiente
De manera oficial y oportuna se ha hecho llegar baterías de preguntas a diversas instancias del Gobierno, con el objetivo de encontrar una meridiana verdad. Son muchas las veces que nos encontramos con medias verdades y, lo que es igualmente grave, con silencios o ausencia de respuestas. Ante esta situación, surge una gran interrogante: ¿Cuál es temor en responder a las preguntas que se formulan sobre el caso Conga? Al fin de cuentas, cuanto más notorio sea el silencio, mayor contundencia va adquiriendo la posición que sostiene: ¡Conga es Inviable!

He aquí algunas de las preguntas que se han hecho y sobre las cuales no tenemos hasta hoy el honor de recibir una respuesta:

1. ¿Quiénes firmaron el Estudio del Impacto Ambiental por parte de la consultora Knight Piesold? ¿Qué especialidad tienen los profesionales que suscribieron dicho estudio?
2. ¿Por qué no se realizaron audiencias públicas en los distritos de mayor impacto como Sorochuco y Huasmín de la provincia de Celendín?

3. ¿Quiénes participaron en la evaluación del Estudio de Impacto Ambiental por parte del Ministerio de Energía y Minas?

4. ¿Por qué la evaluación del Estudio de Impacto Ambiental solo tardó 8 meses, aunque sólo hubiese que tener en cuenta que consta aproximadamente de 17,000 páginas, sin hablar ya de su complejidad?

5. ¿Por qué contrataron los servicios del Sr. Felipe Ramírez Del Pino, si sabían que había trabajado para Yanacocha? ¿No es verdad que para que una persona que ha trabajado para el sector privado, pueda ser contratada en el sector público debe pasar un tiempo prudencial? las cuestiones éticas son importantes por el manejo de información.

6. ¿El Instituto Nacional de Cultura ha expedido o no un Certificado de Inexistencia de Restos Arqueológicos – CIRA al proyecto minero conga o a la empresa que lo desarrolla?

7. ¿El Ministerio de la Producción ha realizado o cuenta con información exploratoria y descriptiva referente a los recursos ictiológicos continentales existentes en el área de incidencia del Proyecto Minero Conga (distritos de Huasmín y Sorochuco en la Provincia de Celendín y La Encañada en la Provincia de Cajamarca), cuyo conocimiento es indispensable para su defensa y protección en armonía con el espíritu del Decreto Ley Nº 25977 – Ley General de Pesca?

8. ¿Cuáles son y en qué consisten los mecanismos necesarios para mejorar las oportunidades de creación de bofedales en los alrededores de los reservorios, teniendo en cuenta que se alterarán 260 hectáreas de bofedales y 17,200 hectáreas de pajonales?

9. ¿Cómo es que la D.G. de AAM no ha contemplado que la vida útil de 50 años para los reservorios artificiales de agua, de remate sujetos a recarga exclusiva mediante lluvias, no constituye en sí una medida razonable de mitigación del grave daño ambiental e hidrológico?

10. ¿Cuál ha sido el procedimiento para contratar a los peritos internacionales? ¿Cuáles han sido los requisitos previstos como perfil del perito? ¿Cómo fue hecha la convocatoria? ¿Quiénes presentaron su postulación?

11. ¿En base a qué criterios se ha determinado que el tiempo para evaluar el Estudio de Impacto Ambiental sea de 40 días?

12. Ante el hecho de que nuestras normas oficiales establecen ciertos rangos permisivos, cualquier EIA se verá limitado para establecer los impactos reales, limitándose a corroborar si existe o no correspondencia con el marco técnico-legal previsto para este tipo de aprobaciones. ¿No resulta que en la práctica nuestras normas conllevan una renuncia al deber de cautelar la seguridad ambiental?

Ante este panorama de silencio y reticencia, crecen la duda razonable y la desconfianza. Mientras, por otro lado, se consolida la tesis de que el proyecto Conga es inviable, pese a toda la campaña desatada para imponerlo ya sea mediante el chantaje o el amedrentamiento. El cinismo mediático acaba por convencernos que el Proyecto Conga no tiene solidez legal, técnica, económica, ni social. Es decir, que sus sostenedores se amparan en la codicia y en la creencia del hecho consumado, lo que equivales a manifestar que al haber sido aprobado por el gobierno anterior, el actual debe continuarlo. Los pontífices del engaño actúan como si la mentira, la criollada y la codicia constituyeran una política de Estado.

Una actividad tan importante para el país como es la minería, no puede ser desarrollada bajo tales argumentos, bajo tales premisas, bajo la modalidad del oscurantismo tenebroso donde se parapetan la viveza, la prepotencia y la mentira.

¡Respondan señores ministros! ¡Respondan señores funcionarios! Cuánto más secretos tengan, más desconfianza tendrá el pueblo, y la tesis de que el proyecto Conga es inviable seguirá consolidándose.

jueves, 1 de marzo de 2012

Ante el Fraude Publicitario Decimos: Conga es inviable



Por: Mesías Guevara Amasifuen (*)

“Hoy vivo feliz, mi esposa vende menú y yo parcho las llantas de los carros, la mina trae desarrollo y progreso”. Con voz lastimera y esforzada se escucha hablar a través de la radio a una persona que dice ser lugareña.

“Minas Conga es un proyecto que trae desarrollo” Es el retintín que de manera permanente se propala por la televisión, a través de un spot televisivo donde se muestra a personas con cascos verdes, alusivos a la actividad minera con espíritu militar. Los actores se esfuerzan en poner cara de felicidad, por la paga que reciben.

Ambas publicidades, definitivamente engañosas, que alcanzan ribetes insultantes, atentan contra la verdad y la autoestima de las personas. Se vierten como si el máximo anhelo de los peruanos fuera vender menús o parchar llantas, como si agachar la cabeza fuera una virtud, como si alrededor de una mina trabajada de manera codiciosa y voraz todo fuera felicidad y progreso. Ante este hecho estoy pidiendo la intervención de INDECOPI, pues está obligado a decir algo al respecto.

No cabe duda que ha llegado el momento de discutir sobre el modelo minero y el plan de desarrollo nacional y regional. Ha llegado el momento de alcanzar un consenso nacional sobre el futuro de nuestro país, de saber en qué sociedad queremos vivir, de entendernos y reconocernos como peruanos sin importar el color de nuestra piel, credo o ideología política. Ha llegado el momento de hacer una gran coalición que se sustente en los nobles ideales y en las virtudes más elevadas como son: La justicia, la Solidaridad y la Libertad.

Tenemos que enfrentar a la codicia con la justicia, a la vanidad con la humildad, a la mentira con la verdad y debemos hacerlo con firmeza y convicción patriótica, en los diversos espacios como las plazas, en el Congreso, en el Acuerdo Nacional, en los medios de comunicación, en la Universidad, etc. Nuestra patria necesita reformas profundas. Lo he dicho muchas veces y lo seguiré haciendo. Entiendo también que son muchos los ciudadanos que participan de este convencimiento y tienen planteamientos que es necesario contrastar.

La discusión sobre el futuro de nuestra patria va más allá de la furia publicitaria que busca imponer un proyecto que en sí mismo es inviable, que aunque reciba el maquillaje del peritaje que a todas luces será convalidado por la norma legal hecha a imagen y gusto de ciertos grupos mineros. La farsa no será aceptada por la sabiduría de un pueblo que sufre, que derrama lágrimas pero que nunca se rinde. La discusión debe centrarse en buscar alternativas de desarrollo a través de diversas actividades productivas y económicas que procuren la sostenibilidad y el progreso de todos los peruanos, y no el de un pequeño y reducido grupo de privilegiados.

Alguien manifestaba: “Si Conga no va, las inversiones se trasladarán a Chile u otros países”. Esa preocupación en parte es cierta; sin embargo, surgen algunas interrogantes: ¿Quién es el responsable de que esto suceda? La verdad es que hay millones de peruanos que no sienten el beneficio de un crecimiento económico; por lo tanto, poco o nada puede preocuparles hacia donde van las inversiones. Lo que a la mayoría le preocupa es tener trabajo, alimento, salud y educación, derechos básicos que en estos momentos se ven muy lejanos. En la discusión nacional deben estar el desarrollo forestal, la defensa del medioambiente y de la biodiversidad, el desarrollo de la Ciencia y Tecnología, la necesidad de generar conocimiento y exportarlo, la urgencia de darle valor agregado a nuestras actividades productivas.

A través de la furia publicitaria se pretende esconder la verdad, y distraer a la opinión pública, con el claro objetivo de posicionar en las mentes que el pueblo cajamarquino es necio, que se opone a la inversión, que no le preocupa su futuro. Es obvio que en realidad sucede todo lo contrario. Al pueblo cajamarquino no solo le preocupa su futuro y el del Perú, sino que viene trabajando en ese sentido, el espíritu de su temple genético hace que esté pensando permanente en la defensa de las causas justas y libertarias. Hoy defendemos el equilibrio Hombre=Agua. Estamos advirtiendo a nivel nacional sobre el peligro inminente de escasez de agua y, de manera específica, sobre lo que sucederá en Lima, nuestra ciudad capital.

Lima está sufriendo y sufrirá más, por la actitud irracional de ciertas empresas mineras, y empresas industriales que se han encargado de convertir al Río Rímac en un vertedero de sus residuos. Más aún, en Huarochirí, en el cerro Tamboraque, una empresa minera ha depositado aproximadamente 600 mil toneladas de relaves muy cerca del río. Esto ocurre ante la indiferencia del Ejecutivo y la ignorancia del pueblo de Lima. Hay peligro inminente de que estos desechos caigan sobre la cuenca. De suceder esto, el desastre tendría terribles consecuencias. Cuánto nos gustaría ver la firmeza del Presidente de la República y del Presidente del Consejo de Ministros en su empeño de afrontar este tema. Cuánta tranquilidad nos daría ver la furia publicitaria puesta al servicio de la verdad.

En la Región Cajamarca nació el Perú con sus defectos y virtudes. Estoy seguro que allí también renacerá. Por eso defendemos la vida y las causas justas. Por eso, ante el fraude publicitario, decimos : Conga es inviable.

(*) Congresista de la República

sábado, 21 de enero de 2012

Con llanques y jebes


Por: Mesias Guevara Amasifuen

Donde hoy, es el mercado 28 de Julio, había una parada, donde los comerciantes se daban cita, algunos llegaban de Chiclayo trayendo sus productos, que principalmente eran verduras y hortalizas, otros bajaban de los pueblos de la altura para vender sus productos. En la parada había puestos muy rústicos donde los comerciantes se acomodaban y vendían sus productos. Este se daba durante los sábados y domingos, los demás días quedaba vacío. Los que vivíamos cerca de la parada, lo convertíamos en una cancha de fútbol.

En esa época mis amigos y yo usábamos llanques (ojotas), los cuales eran hechos con las llantas en desuso, había unas, que tenían la planta gruesa otras eran delgadas. Era parte de nuestra vestimenta, nos permitía caminar a voluntad, nos servía para jugar fútbol. Aunque en épocas de lluvias, por los charcos formados, caminábamos con dificultad porque estos se volteaban, en lugar de que vayan sobre el suelo iban encima de nuestros pies.

Jamás dejábamos nuestros jebes (huaracas), siempre los llevábamos en nuestros cuellos, lo usábamos para cazar palomas, para ir detrás de la fruta, para jugar tiro al blanco. En nuestros bolsillos, transportábamos pequeñas piedras, que eran nuestras municiones que lanzábamos con el jebe.

Andábamos como un pequeño ejército vestidos con llanques y jebes, nos desplazábamos con inocencia infantil, y hermanados por la algarabía de nuestros corazones. Salíamos a los parajes en busca de aventura. En una oportunidad con mi amigo Norbil Montenegro, nos fuimos de cacería por la cruz, el sol era intenso, las palomas estaban sentadas en las copas de los arboles, por eso, con curiosidad y sigilo caminábamos, para no ser escuchados por aquellas avecillas,

En eso, en la espesura del árbol un cuerpo misterioso de color amarillo y negro, llamó nuestra atención, aparentaba ser un nido o un ave rara.De mutuo acuerdo simultáneamente le disparamos, ambos tiros que dieron en el blanco, que al sentir el impacto del golpe, levantó cabeza y una centelleante lengua viperina, era una serpiente que aproximadamente medía dos metros.

El terror nos invadió a ambos, ya que habíamos escuchado muchas historias de serpientes. Decían que algunas eran voladoras otras devoradoras, volvimos a recargar nuestros jebes y con rapidez disparamos, para no darle la oportunidad para que reaccione, ambos tiros golpearon su cabeza, haciendo que esta se desplome muerta. Cogimos una rama y la transportamos a la ciudad en señal de victoria, habíamos domado a la bestia.

La palomillada siempre estaba presente, la curiosidad por la aventura, el riesgo no contaba, lo que importaba era la conquista, era el triunfo. Nos íbamos a las fincas a coger mango verde, las mismas que comíamos con sal. Adrede, nos metíamos al estadio a jugar, sabíamos que esto al guardián le molestaba, por eso con el látigo agitado al viento nos sacaba corriendo, y para que no nos alcance, felinamente trepábamos las paredes y corríamos alrededor cuidando el equilibrio para no caer.

También nos íbamos al Colegio Agropecuario (hoy Villanueva Pinillos), donde jugábamos intensos partidos de fulbito, o sacábamos fruta de su huerta, por cierto hoy ya ida. En el colegio estaba el regente Alarcón, quien nos hacía formar llamándonos el “batallón cuchara”, el cual iba marchando hasta la cocina del internado donde el amo y señor era el flaco Jiménez, quien generosamente nos daba un jarro caliente de leche y avena acompañado de un pan. A los internos los llamaban “Los aguayuceros”. Me hice hincha del colegio agropecuario, hoy convertido en el ADA.

Las calles de Jaén eran testigos de nuestras acciones, a veces temerarias. Buscábamos las calles con mayor pendiente y desde su cima, metidos en el hoyo de una vieja llanta nos lanzábamos cuesta abajo, el peligro no importaba ni tampoco era advertido.

A lo lejos me veo con mi jebe, mis llanques y mi polo con la inscripción de “Perú Campeón”. La melancolía de los tiempos idos, me arrebata un suspiro y luego pienso que hermosa es mi tierra y qué grande es mi país.

domingo, 15 de enero de 2012

Como el árbol.


Por : Mesias Guevara Amasifuen

Subo al vuelo 2118, de American Airlines, rumbo a Orlando. Me han programado un curso de capacitación, el mismo que se desarrollará en el Resort Swam, ubicado en el corazón de Disney. Al llegar, noto que nos hemos congregado personas de diversas partes del mundo, vamos a conversar sobre alta tecnología relacionada con las telecomunicaciones.

Los ambientes son grandes y modernos. En la noche, los faroles brillan majestuosos dándole al ambiente un aire edénico para lo cual colabora la luna, con sus reflejos en los pequeños lagos artificiales.

Al final de la intensa jornada, el cuerpo llama al descanso. Me voy a mi habitación, que por cierto es grande y cómoda, propia de un hotel cinco estrellas. Me dispongo a descansar, pero antes de ello me acerco a la ventana y miro el esplendor de la noche, me recuesto en el apocento y me pongo a meditar.

En esa meditación el recuerdo me llama, imaginariamente me transporto a las montañas de Jaén, Colasay y Juan Díaz. Me atrapa el hechizo del verdor de las plantas, la pureza de las aguas cristalinas y el aroma de las flores. En la película de mi recuerdo, brota una escena en la que aparezco con mis primos, sentado bajo la luna, en medio de la noche oscura, en las humildes casas los candiles son los grandes protagonistas, en ellos débilmente juguetea el fuego. Jugamos al gran bonetón y para romper la soledad, acordamos cantar: “Paloma blanca, alas de plata, piquito de oro. No te arremontes por ese monte, porque yo lloro. Los cazadores tiran su tiro, tiro perdido. No te hirieron, no te mataron porque yo estaba junto a tu nido…..”, la noche se llena de júbilo.

Continuamos con el repertorio y entonamos: “Como la flor del café, vacila mi pensamiento, ay no puedo vivir contento desde que te conocí…”. La serenata continúa, y con pasión cantamos: “Pobres violetas que mal te han hecho, para que la pongas en un rincón. Siendo un florero tu corazón……”. Todas las melodías las habíamos escuchado y aprendido de nuestros padres y de nuestro abuelo.

Mientras tanto el fogón resalta en la cocina, en ese instante débilmente da fuego, en un tizón hay el rezago de un pequeño destello que se resiste a morir. Esta listo para encenderse en el alba y cocinar el alimento del día.

La cinta cinematográfica sigue corriendo, ahora viene el recuerdo de mi caminata, de Juan Díaz a la montaña. El camino es cuesta arriba, se hace lenta pero firme. El paisaje es hermoso, los varejones crecen rectos y altos, las aves vuelan en bandadas. Al llegar a la cima, como premio recibo una caricia de la fresca brisa, a lo lejos se divisa Chunchuquillo, prospero centro poblado. Al lado del camino, con generosidad nos espera una mata de Mora, cargada con mucha fruta. No puedo resistir a la tentación y cogo muchas moras entre rojas y moradas.

En la montaña, al caer la noche de mi sueño, voy a la cama que con generosidad los amigos de mi padre me han preparado, esta y la Choza son muy modestas. La cama es una tarima hecha de guayaquiles (bambú) y tiene como colchón las jergas de los caballos, estos se ponen en el lomo de los jamelgos, para que se les pueda instalar la montura. La choza es de quincha y el techo de calamina que al llover se conierte en una coladera. Con el cuerpo cansado me quedo profundamente dormido. Al día siguiente, el sol intenso de Florida entra por la ventana del Hotel, me despierto y me veo acostado en una cama muy cómoda.

Me acosté en una cama modesta y me desperté en una moderna. No estaba en la montaña de Juan Díaz, sino en Orlando. Me toco, me siento y luego digo: Soy el mismo. Soy como el árbol que no olvida sus raíces.